domingo, 26 de septiembre de 2010

¿Es tan necesaria la planificación a la hora de viajar?


No se si sea el mas indicado para dar respuesta a la pregunta. Tal vez muchos de mis sesgos –no sólo el profesional- hagan que mi mirada sea algo particular. Sin lugar a dudas soy alguien que siempre alienta e incita a viajar. Creo que no hay mejor opción que esa.


De todos modos para mi la gran organización es poco útil. Ojo, todo dependerá de la magnitud del viaje, el destino en cuestión, a veces la edad (aunque mi experiencia viajera ha tirado por tierra ese mito) y por sobre todo del tiempo que dispongamos.


Lo fundamental es la predisposición que uno tenga y todo se irá dando de acuerdo a lo esperado, y si alguna sorpresa surge durante nuestro viaje a veces lo más impensado hace del mismo mucho más interesante. Luego en una lectura en perspectiva, aquellos elementos que quizá nos generaron una amargura de momento sean más que una razón de risas y anécdotas.


Si tu caso es el de viajar con poco tiempo (me ha pasado mas de una vez), a veces un “seudo itinerario” pueda resultarnos útil. Aunque posiblemente (no desesperar si esto sucede) no respetemos a rajatabla dicho itinerario y hasta no logremos cumplir con todo lo que nos habíamos propuesto (todo dependerá que tan ambicioso sea). Precisamente la idea es solo tener en mente los lugares que quisiéramos recorrer y algunas actividades posibles en dichos lugares, sin tener que estar atados a lo estipulado en el papel.



Con amigos viajeros en Bogota, Colombia - Mega asado

Como numerosas veces digo, los mejores viajes siempre han sido aquellos en los que no he planificado nada, que surgieron a último momento y en donde era mínimo lo que sabia. A fin de cuentas era poco lo que me podía “salir mal”, ya que todo lo que viniera sería sorprendente y haría que lo disfrute en mayor medida.


Mi consejo es siempre tomar el viaje con calma, dejar que las situaciones nos sorprendan y aprovechar el mismo para alejarnos de la rutina. ¿Sino que lugar le estamos dando al viaje?




miércoles, 22 de septiembre de 2010

Bolivia: ¿Por qué no?



El tiempo me apremia, ya llegó la primavera y el Blog nuevamente quedo olvidado. De todos modos la reciente consulta de unos vecinos, me hizo volver a escribir.


Su consulta era respecto a que podían hacer en Bolivia, ya que tenían muchas ganas de visitar este país en sus próximas vacaciones de Octubre.


Me llamó la atención me tocaran el timbre para hacer esa consulta, ya anteriormente me habían preguntado al respecto. Como siempre mi madre es el punto de contacto, ya que era ella quien les había contado por vez primera sobre mis sucesivos viajes a dicho país.



Cerro Rico - Potosí, Bolivia

Ahora bien la pregunta es clara ¿Por qué Bolivia? Aunque la respuesta es realmente compleja. Si queremos ser rápidos podríamos preguntarnos a la inversa, tal como hacia Aristóteles para encontrar algunas definiciones ¿Por qué no Bolivia?


Lo primero que digo hasta el cansancio a todo viajero que tiene en mente conocer este país, es que Bolivia se asemeja a películas de los años 50, un país en blanco y negro, donde la historia pasó y ellos nunca se dieron cuenta.




Museo de Sal - Salar de Uyuni, Bolivia

De hecho para conocer algo de Bolivia pueden ver numerables entradas de mi blog, la más reciente http://viajeroamigos.blogspot.com/2010/08/mi-tercer-visita-la-paz.html



Bueno, entonces aún no dimos la respuesta de cuales serían algunas de las razones para visitar Bolivia, aunque si nos planteamos la negativa, de cual seria la razón para no hacerlo. Precisamente esa definición de la cual hago tanto uso es una primera aproximación que nos permite dar cuenta de que es lo que encontraremos cuando lleguemos a Bolivia –sobre todo la parte “occidental”-


Para no ser extenso, solo podemos decir que quien visite Bolivia quedará tan pero tan impactado que le será difícil plantearse otro destino en sus siguientes vacaciones y/o aventuras.

Un país que no mantiene casi puntos de contacto con los demás países de la región. Con tanta diversidad cultural (comidas, costumbres, cotidianeidad, etc) que nos hace pensar que estamos en otro planeta. Sin dudas Bolivia nos invita a un sin fin de actividades características con un componente poblacional que es complicado encontrar en otro país de Sudamérica.



Podemos disfrutar de sus innumerables Mercados, de sus paisajes a veces tan dispares (un clima sub-tropical de transición al trópico amazónico como Coroico y zonas mas áridas como Oruro o mismo La Paz), contacto con pueblos originarios en casi todo el territorio boliviano, ciudades con arquitectura colonial (como Sucre, en muchos puntos cuna de la historia de Latinoamérica, con la Casa de la Libertad, museo único en su especie).



Casa de la Libertad - Sucre, Bolivia



Sin dudas Bolivia es una oportunidad para descubrir un mundo distinto y porque no, para redescubrirse. Adelante, un sin fin de aventuras están en sus manos.